Todos los directivos -incluidos los de restaurantes- necesitan una buena capacidad de liderazgo para tener éxito. Definir el liderazgo puede parecer a veces difícil por su complejidad. No hay un rasgo que nadie haya identificado que haga de una persona un gran líder.
Cada industria o trabajo requiere personas con habilidades específicas. El liderazgo puede ser hereditario, pero el candidato adecuado puede aprender a ser un buen líder perfeccionando aquellas habilidades específicas relevantes para su negocio.
La siguiente es la lista de habilidades esenciales de liderazgo que un gerente de restaurante debe tener para lograr éxito en el sector gastronómico.
1- Comunicación
Debe aprender a comunicarse de forma eficaz y eficiente con su personal. Manifestar sus expectativas y asegurarse de que cada miembro de su equipo entiende su papel.
Debe aprender a escuchar. A pedir opiniones y asimilarlas. Aunque no siempre es necesario explicar los motivos de una decisión, debe hacerlo siempre que sea posible y apropiado.
Las reuniones periódicas con el personal deben facilitar la comunicación. Estas no tienen por qué ser largas ni diarias. Planificar el orden del día con antelación. Las reuniones deben ser una oportunidad de aprendizaje cuando sea posible. Esto acercará a los empleados animándoles a asumir sus funciones.
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2- Rendición de cuentas
Debe hacer que los empleados rindan cuentas; asegurarse de que cada miembro del personal sabe exactamente lo que tiene que hacer y cómo ejecutarlo para hacerlos responsables de ello.
3- Formación
La responsabilidad como líder es desarrollar y mejorar las habilidades profesionales de los empleados. Los programas de formación deben reflejar esto. Realizar una formación cruzada con sus empleados. Esto ayudará cuando falte personal y el empleado lo apreciará ya que podrá añadir una nueva habilidad a su currículum.
4- Flexibilidad
Se debe saber cuándo hacer cambios. Esto no significa que se tenga que hacer cada cambio que sugiera su personal o un cliente si no tiene sentido.
No se debe ser inflexible con las normas ya puede costar dinero. Debe Revisar continuamente las políticas y procedimientos. Si alguien hace una sugerencia, debe analizar si ahorra dinero, proporciona un mejor servicio al cliente o ayuda a aumentar la satisfacción de los empleados.
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5- Actitud
Se debe mantener una actitud positiva, es probablemente uno de los rasgos de liderazgo más importantes que hay que cultivar en este negocio. El tono afecta, para bien o para mal, al cliente y al personal.
Si se tiene un mal día, se debe pensar en el lugar de trabajo como si fuera un escenario a la hora del espectáculo: se tiene que ofrecer a los clientes la mejor experiencia posible. La tristeza y el mal humor, solo logran afectar negativamente a los clientes.
6- Paciencia
La paciencia es fundamental para el éxito. Se la debe cultivar en la actitud y las acciones. A veces, esto puede ser difícil dado el entorno de alto estrés y ritmo rápido de un restaurante durante las horas o temporadas de mayor actividad.
Sin embargo, sin paciencia, la capacidad de comunicación con el personal y los comensales se verá afectada. Si no se tiene paciencia con los empleados, no podrá haber buena comunicación, y las operaciones y las tasas de rotación de los mismos se verán afectadas. Si no hay paciencia con los clientes, no volverán.
7- Estado físico
En muchos restaurantes se trabaja 12 horas o más al día. Se necesita tomar un tiempo para rejuvenecer el cuerpo y el espíritu. Es importante dedicar tiempo a hacer ejercicio y a relajarse. Tomar un descanso durante el día y reservar una hora en los periodos de calma para ir al gimnasio. Se debe proyectar energía y entusiasmo.
8- Limpieza
Un buen líder en el negocio de la restauración mantiene un comedor y una cocina inmaculados. Debe dar el ejemplo a los empleados si espera que mantengan el orden y la limpieza.
Los derrames deben ser limpiados inmediatamente, incluso en los momentos de mayor actividad. Recoger las mesas rápidamente. La limpieza no sólo puede afectar la reputación del negocio, sino que se puede dar lugar a posibles problemas de seguridad y responsabilidad.
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9- Seguridad
Un entorno de trabajo seguro no sólo es obligatorio por ley, sino que también puede afectar a los resultados. Debe asegurarse de que el personal entienda lo importante que es la seguridad. Exigir, por ejemplo, calzado de trabajo antideslizante y otras prendas adecuadas, hacer cumplir estas normas. Hacer que la formación y la actualización en materia de seguridad formen parte de las reuniones de personal.
10- Habilidades interpersonales
Trabajar en las habilidades interpersonales. Algunas personas son simpáticas e interactivas por naturaleza. El líder tímido o menos gregario que la mayoría, debe aprender a mejorar sus interacciones.
Establecer buenas relaciones con los clientes. Saludar a los comensales, darles las gracias por venir y entablar una pequeña charla de vez en cuando. No ser demasiado distante con los empleados. El líder es jefe y no amigo, pero no debe ser frío y distante.
Recordar los cumpleaños del personal y reconocer el nuevo bebé o el compromiso de alguien será muy apreciado. Si los empleados saben que se preocupan de verdad por ellos, contribuirán a infundirles más entusiasmo y lealtad, creando un ambiente cálido y amistoso que los clientes notarán.
11- Prestar atención a la cocina
Con demasiada frecuencia, los gerentes de restaurantes pasan la mayor parte de su tiempo fuera de la cocina. No debe olvidarse de la comida. Debe probar los platos y hablar con los cocineros. Se puede tener el comedor más limpio del mundo, el personal de sala más eficiente y excelentes habilidades interpersonales con los clientes, pero si la comida no sabe bien, los comensales no volverán. Los camareros necesitan probar el menú para que puedan hablar con conocimiento de causa a los clientes sobre la comida.
Hablar con los cocineros sobre lo que se puede hacer para facilitar el trabajo. Puede ser algo tan sencillo como un accesorio para un utensilio de cocina o reorganizar ligeramente la distribución para mejorar la eficiencia.
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12- Recordar que se está dirigiendo un negocio
Dirigir el negocio de forma eficiente, con el objetivo de mantener los costes bajos y los beneficios altos.
Prestar atención a los precios. Pensar en formas de reducir costes. Dedicar tiempo a revisar las cuentas cada mes. Buscar siempre formas de comercializar de manera eficiente, mejorar los elementos del menú, racionalizar las operaciones y ayudar al personal a hacer mejor el trabajo. Trabajar para mantener siempre las cosas en funcionamiento, cuidando al personal y el resultado final cada día.